Alcanzar el cero neto en las emisiones de carbono no es solo una urgencia ambiental; también presenta oportunidades significativas para organizaciones de todos los tamaños.
Una herramienta para los responsables de políticas y todas las personas que trabajan para conseguir el cero neto de emisiones de gases de efecto invernadero para su empresa, grupo o país
Lanzadas en la COP27, las Directrices para el cero neto abordan un importante obstáculo para un mundo en el que las emisiones de gases de efecto invernadero se reduzcan al mínimo y se equilibren con las absorciones: el fragmentado panorama de la gobernanza del cero neto. La contraposición de enfoques y conceptos de «cero neto» siembra la confusión. Estas Directrices brindan una referencia común para los esfuerzos colectivos, al servir de base global para armonizar, comprender y planificar el cero neto para los agentes a nivel estatal, regional, municipal y organizativo.
Descargar gratis
Para apoyar la acción mundial por el clima, ISO ofrece las Directrices para el cero neto para su descarga gratuita y consulta en línea:
Una interpretación común de «cero neto»
Las Directrices para el cero neto marcan un camino común para:
- la definición de «cero neto» y los términos relacionados (absorción de gases de efecto invernadero, compensación, cadena de valor, etc.), aclarando las diferencias de alcance entre las emisiones directas, las emisiones indirectas procedentes de la energía adquirida y otras emisiones indirectas derivadas de las actividades de una organización,
- unos principios de alto nivel para todos los agentes que quieran alcanzar la neutralidad climática,
- una orientación práctica para llegar allí lo antes posible, a más tardar en 2050 y
- una comunicación transparente, declaraciones creíbles e informes coherentes sobre emisiones, reducciones y absorciones.
Las Directrices se alimentan del impulso de las iniciativas voluntarias existentes y potencian su impacto. Unas declaraciones de «cero neto» globalmente aceptadas son más fáciles de comparar, generan un bucle de ambición y pueden ampliarse con una normativa mejor.
Amplio consenso construido a través de un proceso abierto
Más de 1 200 expertos de más de 100 países contribuyeron a hacer de las Directrices para el cero neto una referencia común eficaz para las directrices para el cero neto.
El proceso del Acuerdo de Taller Internacional (IWA) de ISO brindó la plataforma perfecta para facilitar una participación amplia y directa.
¿Qué es un Acuerdo de Taller Internacional ISO?
Para responder a las necesidades urgentes del mercado, se preparan Acuerdos de Taller Internacionales (IWA, por sus siglas en inglés) a través de un mecanismo de taller al margen de las estructuras de los comités de ISO, siguiendo un procedimiento que garantiza la oportunidad de participar a la más amplia variedad de partes interesadas relevantes de todo el mundo, y se aprueban por consenso entre los distintos participantes en los talleres. Si existe un comité de ISO cuyo alcance abarque el tema, el Acuerdo de Taller Internacional publicado se asigna automáticamente a este comité para su mantenimiento.
Un Acuerdo de Taller Internacional se revisa tres años después de su publicación y puede seguir procesándose para convertirse en una Especificación Disponible al Público, una Especificación Técnica o una Norma Internacional, según las exigencias del mercado. Un Acuerdo de Taller Internacional puede existir durante un máximo de seis años, tras los cuales se retira o se convierte en otro documento ISO.
Now available in six languages
In addition to the English, French, Japanese, Russian and Spanish versions available via iso.org, the following translations are available via ISO member websites:
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German: Leitlinien für Netto-Null, provided by DIN, the ISO member for Germany.
Las Directrices para el cero neto (IWA 42:2022) fueron un encargo de Our 2050 World, una colaboración mundial para acelerar la acción hacia el cero neto a través de normas. Dicha colaboración incluye a ISO, la campaña Carrera hacia el cero y el Global Innovation Hub de la CMNUCC.
Netflix: A company example
Netflix’s climate targets and progress are in alignment with the core principles of the ISO Net Zero Guidelines, and its continued sustainability journey is therefore instructive for other companies to learn from.
Netflix’s climate goals align with the latest climate science and take immediate action to maintain a global 1.5°C pathway. In support of global net zero goals, the company also invests in instruments to protect nature and remove carbon from the atmosphere, proportional to their remaining emissions. Netflix’s strategy centres around driving near-term, ambitious action today, rather than deferring action to future years (despite systemic challenges to global decarbonization).
Although the exact enabling technologies, policies, and infrastructure that Netflix needs for absolute decarbonization don’t exist today, the company is transparent about its efforts to address current challenges. Namely, Netflix is engaged in driving demand and building collective action (e.g. through the Clean Mobile Power Initiative, Sustainable Aviation Buyers Alliance, and Business Alliance to Scale Climate Solutions, the Sustainable Production Alliance, and BAFTA’s Albert). Additionally, through its Sustainability Stories collection, Netflix is demonstrating how wide-ranging and entertaining stories that touch on sustainability topics can be.
